En un reciente informe, citado hoy por el diario Novo Jornal, la OMS reconoce además que la respuesta a la epidemia en Angola agotó por vez primera las reservas mundiales de la vacuna.
"La respuesta al brote de Angola agotó (dos veces este año) las reservas mundiales de seis millones de dosis de vacuna contra la fiebre amarilla. Esto no tiene precedentes", indica el documento.
Agrega que en el pasado, el Grupo de Coordinación Internacional (ICG) nunca "usó más de cuatro millones de dosis para controlar un brote en ningún país".
Según la OMS, "lleva mucho tiempo producir la vacuna contra la fiebre amarilla (unos 12 meses)" y resulta "difícil prever con anterioridad las cantidades necesarias cada año para responder a los brotes".
Añade que los cuatro mayores laboratorios mundiales de producción de la vacuna "trabajan sin descanso" para recuperar los niveles de reservas, que a principios de junio estaban nuevamente en 6,2 millones de dosis.
"Es más, esto resulta insuficiente si surgen brotes simultáneos en otras áreas densamente pobladas", alerta la OMS.
En un informe anterior apunta que las autoridades sanitarias angoleñas vacunaron a 10. 641. 209 personas hasta el 10 de junio.
Precisa que "casi la mitad del país fue inmunizada y Angola recibió 11.635.800 vacunas. Fueron realizadas campañas masivas de vacunación en todos los municipios de Luanda, en siete distritos de Benguela, en cinco de Cuanza Sur, cinco de Huambo, tres de Huila y dos de Uige".
Recientemente, el ministro angoleño de Salud, Luís Gomes, comunicó que el Ejecutivo suministró cerca de 70 millones de dólares para cubrir los costes de vacunas, medicinas esenciales y gastos operacionales en el combate contra el mal.
Durante su intervención en el debate general de la 69 Asamblea Mundial de la Salud, celebrado del 23 al 28 de mayo en Ginebra, alertó de la escasez de vacunas contra la fiebre amarilla en el mercado internacional, pues las existencias resultan insuficientes para la demanda mundial.
"Contamos con las aportaciones de la OMS y de la Alianza GAVI para el aumento de la producción de vacunas", señaló.
Según el último informe, la epidemia registra en Angola 345 muertes desde su rebrote en diciembre, en el capitalino municipio de Viana, de un total de 3.137 casos sospechosos de contagio, de los cuales 847 se confirmaron en laboratorio.