En una edición anterior sobre el mismo tema, bajo el título «Djibouti-Dakar-Ouagadougou: el calvario de una madre», se relacionaba la desgracia en Ouagadougou de una joven mujer, originaria de Djibouti.
Por amor y por la buena idea que tenía sobre el país de los Hombres Íntegros, ella accedió desafiar todo tipo de obstáculos al escoger el camino a Ouagadougou en 2011, junto a un joven oficial burkinabés de nombre Zakaria Nacro, quien la mujer habría conoció unos años atrás en Dakar, Senegal.
Con un embarazo en avanzado estado de gestación, la mujer hizo el largo viaje por carretera con el joven oficial, primero a Dakar y luego a Ouagadougou. Después de dar a luz en enero de 2012, su matrimonio tomó otro viraje, de un sueño a una pesadilla.
Hoy en día, la mujer, originaria de Djibouti, no puede ver a su hijo, le quitaron el niño. Por casi siete meses, no ha podido tener ningún contacto con su hijo de tan solo año y medio, ni mucho menos obtener su custodia, a pesar de una decisión judicial a su favor.
Lo que es peor, fue sometida a abusos físicos. Desde hace más de medio año, su denuncia por una agresión que incluye golpes y heridas lleva mucho tiempo en los cajones de la gendarmería sin obtener ningún dictamen.
Imágenes de Djibouti.- El Muni.
Claramente se ha dicho que alguien sepultó ese expediente. No contenta con no hacer su trabajo, la gendarmería se demuestra alérgica a las críticas.
De hecho, después de la publicación de este artículo, la pobre señora allí se presentó para informarse sobre la denuncia que hizo, mas no fueron necesarios argumentos para que se la emprendieran contra ella.
La gendarmería trata mal a esta mujer por haberse atrevido contar su calvario a la prensa.
Si la prensa puede resolver el problema, que ella se lo mire, dicha prensa se lo haría saber. Pero, ¿Por qué es tan difícil?
¿Cuándo las autoridades de este país -autoridades a las que ella se dirigió para pedir ayuda en su desgracia- decidirán su suerte? Asunto a seguir…
Fuente: Reporter; netafrique.net
Traducción / Edición: Bk
El Muni