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Luanda, 30 jul 2016.
La epidemia de fiebre amarilla en Angola registra hoy 364 víctimas mortales de un total de tres mil 748 casos sospechosos de contagio, de los cuales, 879 se confirmaron en laboratorio.
Citado por los medios de comunicación, el más reciente informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS) revela que más de 123 casos dudosos de la enfermedad se contabilizaron en el país en la tercera semana de julio.
La nota precisa que decrece el brote en el territorio nacional y no fue corroborado caso alguno de contagio en el mes que termina.
El último caso debidamente homologado se rastreó a finales de junio, en el municipio de Cahama, provincia de Cunene, a 975 kilómetros al sureste de Luanda.
Recientemente el representante de la OMS en Angola, Hernando Agnelli, elogió la labor que realiza el Gobierno para dar respuesta al mal de al fiebre amarilla.
El trabajo hecho y el que mantiene (el Ejecutivo) contra la enfermedad resulta enorme. Se perciben resultados satisfactorios desde el inicio, dijo Agnelli.
Pese al progreso, el representante recomendó vigilancia, teniendo en cuenta la facilidad de reproducirse del mosquito Aedes aegypti, transmisor de la enfermedad.
Aconsejó a todos los angoleños, principalmente a residentes en las provincias afectadas, a que se vacunen antes de la época de lluvias, período en que habrá más mosquitos y la posibilidad de reaparición de la dolencia en quienes no fueron inmunizados.
"Quiero recordar que la vacuna no mata; lo que mata es la enfermedad", insistió Agnelli.
En esa misma línea, el ministro angoleño de Salud, Luís Gomes, aseguró que la epidemia tiende a remitir en el país, aunque todavía las autoridades sanitarias se enfrentan con enormes desafíos para implementar la inmunización contra el contagio en las 18 provincias, en particular, por la falta de vacuna en el mercado mundial.
Precisó que el Plan Nacional de respuesta a la fiebre amarilla contempla cinco pilares, entre ellos la intensificación de las actividades de vigilancia epidemiológica en todas las provincias para la búsqueda activa e identificación y confirmación de casos sospechosos.
Según la OMS, Angola recibió cerca de 14 millones de vacunas contra la fiebre amarilla e inmunizó a más de 11 millones de personas desde febrero de este año, en una población estimada en 24 millones de personas.