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El corazón artificial de la compañía Carmat, había estado implantado en un hombre de 76 años muerto el 2 mars, «se paró brúscamente», explicó al Journal du dimanche el Profesor Alain Carpentier, quien concebió el proyecto, hablando de «corto-circuito».
«Ha habido un corto circuito. Eso causó un paro cardíaco idéntico al que puede presentar un corazón natural patológico», cuenta el profesor al JDD. «Tratamos de comprender de dónde procede ese problema electrónico y por qué», Prosigue el profesor. «Aún no conocemjos las causas exactas de la muerte», cocluye el profesor Carpentier.
«Pero, ciertas causas han sido descartadas y es lo más importante desde mi punto de vista: la muerte no está ligada a una complicación del enfermo, ni al principio fundamental de esta prótesis que está hecha de materiales biocompatibles para limitar la formación de coágulos y los riesgos de trombosis».
Hospital Val-de-Grâce de parís.
Leer : El primer paciente con un corazón artificial autónomo ha muerto y Corazón artificial Carmat prosigue su funcionamiento a pesar de la muerte del paciente.(Enlace en francés)
El JDD revela igualmente el nombre del paciente, mantenido en secreto hasta ahora: se trata de Claude Dany, que reposa hoy en el cementerio de su pueblo, en Normandía. «En mi opinión, no donó su cuerpo sino su vida. A pesar de nuestra pena ya no le tenemos (…), pero la investigación debe continuar», declaró su hija Isabelle al semanario.
Sufría de insuficiencia cardíaca terminal; dicho paciente fue elegido para recibir el primer corazón artificial autónomo Carmat para así paliar la penuria del corazón transplantado así como aportar una solución a las contra-indicaciones del transplante.
La intervención que había durado una decena de horas fue realizada el 18 de diciembre del 2013 por los profesores Christian Latrémouille y Daniel Duveau en el departamento del Profesor Jean-Noël Fabiani, bajo la dirección del Profesor Alain Carpentier, quien concebió el proyecto.
En las primeras semanas el paciente «se recuperó muy bien», cuenta el profesor Carpentier. «y después presentó algunas complicaciones. (…). El corazón tiene sus límites. Con su pasado patológico, el organismo [del paciente] estaba como un traje demasiado usado.
Se repara por un lado y se suelta por el otro». El profesor rinde homenaje al hombre de 76 años que se había beneficiado del implante. «Ese paciente nos ha ayudado a dar un gran paso», confiesa. «Los que aceptan participar en nuevas terapias son los verdaderos pioneros del progreso de la Medicina».
Fuente: Le Monde.fr avec AFP
Desfile por la liberación de París, imágenes de parís