¿Qué otra cosa querrán que haga un guineano para hacer política democrática libremente en su país como ciudadano?

Para que cierta gente siga profiriendo estupideces como que no hay oposición, no hay nadie que le haga frente en las urnas a Teodoro Obiang, bla, bla, bla, bla, ..., cuando para Guinea Ecuatorial el sentido común aconseja que todos sigamos las reglas y el juego democrático para un cambio político pacífico en nuestro país, el dictador guineano hace todo lo posible para reventarlo todo como siempre.

Aunque más de un guineano hemos pensado como última alternativa en  una insurgencia armada para derribar el régimen de terror de Teodoro Obiang, ésta sigue siendo a la vez una vía que la mayoría de guineanos y guineanas no asumimos.

La vía de la confrontación arma para devolverle la libertad al pueblo guineano es muy arriesgada y sería muy costosa para toda la población guineana. Por eso siempre se le ha querido hacer ver al dictador guineano que la vía democrática es la mejor opción para todos. Pero, no escucha y le sigue dando igual.

Guinea Ecuatorial es un país pequeño, muy pequeño, tanto como atreverme a decir que casi todos tenemos, de alguna manera, relaciones familiares o consanguíneas. Desatar una guerra fratricida en nuestro país sería una decisión posiblemente irresponsable con consecuencia devastadoras e irreparables para todos los guineanos y todas las guineanas.

Cuando el  resto del mundo sabe  que Teodoro Obiang y su régimen han mentido siempre al pueblo de guineano, que es criminal y corrupoto hasta no poder, muchos guineanos y guineanas se lo toman como ungüento para el dolor articular.

El dictador guineano y todo su aparato represor y propagandístico inoculan  la ignorancia y la falsedad en la ciudadanía, así como propician el culto a la persona de Teodoro Obiang como si de un mesías se tratara.

El régimen guineano ha elaborado una cantinela que ha puesto en boca de los ciudadanos y ciudadanas de Guinea Ecuatorial: "no hay nadie, no hay oposición", una mentira tan vulgar como abominable y la gente, estúpidamente, se lo cree, obviando la cantidad de guineanos y guineanas preparados que hay en el mundo, capaces de asumir perfectamente las riendas de la dirección de nuestro país. La única persona que impide que eso pueda suceder es Teodoro Obiang.

Me da igual de quién se trate o de qué partido político milite la persona que suma la dirección de nuestro país en la gobernabilidad, siempre y cuándo sea de la idoneidad que requiera el puesto y cumpla con el juego y las reglas democráticas.

Es de obcecación fanática ir sosteniendo que no hay nadie, no hay oposición cuando Teodoro Obiang amedrenta a toda persona o formación política que le quiera hacer sombra.

En los últimos años, una de las estratagias en la agenda del dictador guineano ha consistido y consiste en ir decapitando y desmembrando las formaciones políticas opositoras de donde surgieron todas las erres que ya conocimos, y ningún partido político opositor al régimen guineano, tando los de dentro como los del exilio, ha podido eludir dichas maniobras.

De tanto el régimen ha hecho llamamientos para que la oposición retorne hacer política para la construcción de nuestro país, todo el mundo sabe que es una trampa con la que el dictador pretende tener mejor controlados a los partidos que no le sosn afines.

Y he ahí la situación actual de la formación que lidera don Gabriel Nse Obiang. Desde el momemento que Gabriel no ha aceptado respaldar la candidatura del dictador para las elecciones celebradas hoy, se ha convertido en enemigo a batir.

Estoy convencido que si Gabriel hubiera aceptado respaldar a Obiang como el resto de sus partidos títeres, el dictador no habría tenido necesidad de recurrir a la ley que exige haber estado los últimos cinco años en el país para optar a la presidencia. Y en estos momentos, la formación política Ciudadanos por la Innovación (C.I.) no estaría siendo perseguida.

Aplaudo la decisión de la CPDS de no concurrir a estas elecciones, lo que demuestra que don Andrés Esono Ondo sabe escuchar a la gente, a sus posibles votantes. Si la CPDS volvía a seguirle el juego al dictador en estos comicios con en todas las ediciones anteriores para luego conformarse con un mísero escaño, que a nadie le quepe duda que la formación socialista guineana estaría sembrando  desconfianza que le reportaría la desafección ciudadana sin aplazamientos.

Ahora, que los abrazafarrolas, chupópteros y  lametraserillos del régimen guineano nos digan si hubo alguien o no para concurrir en las elecciones, desde el momento que su patrón amedrenta y tiene por enemigos a todo adversario político.

Es de cobardes exigir valentía a los demás cuando eres el único que lleva un arma. Si Teodoro Obiamg dejara de utilizar al ejército contra los dignos ciudadanos de Guinea Ecuatorial y tuviera la mínima valentía de concurrir a la elección a presidente de manera limpia, transparente y en igualdad de condiciones, no me tomaría por estúpidos a quienes como el Ave María van repitiendo una y otra vez que no hay oposición, que no hay nadie que le haga frente a Teodoro Obiang.

Los recientes acontecimientos en Guinea Ecuatorial a pocas horas de la elección a presidente deberían servir para que se avergüence la gente que jaléa a un gobierno cobarde que no es capaz de competir con la verdadera oposición sin amedrentar y amenazar. Eso es de cobardes.

Dejen de decir estupideces y exíjanle a Teodoro Obiang que sea valiente por una vez en su vida y abrace las regalas democráticas, o naide se creerá  la cantinela de que no hay nadie ni oposición para hacerle frente.

Idea/Edición: Bk

El Muni