"Altas personalidades de todos los gobiernos habidos en España se están haciendo millonarios con la situación de Guinea Ecuatorial. No es cosa de hoy, sino desde siempre. El pueblo guineano no lo sabe porque esas personas se mueven en cauces fuera de la mirada y los oídos del pueblo llano de Guinea Ecuatorial.
Es una vergüenza histórica que hayamos tenido solo dos pequeñas colonias de nada, perdona la expresión -se excusa el oficial-, Guinea y Sahara y estemos hablando de esos territorios como si no tuvieran nada que ver con la historia de España.
El que te diga lo contrario, hijo, miente. Guinea Ecuatorial es como una veta de oro para los depredadores de la administración española, y no les importa lo que pase con el pueblo guineano, lo que contrasta con el sentir general del pueblo de España que se duele con los acontecimientos poco loables en ese país que dejamos a la deriva".
Mira que ha pasado mucho tiempo desde la independencia, le recuerdo yo al policía. Las cosas ya pueden haber mejorado muchísimo y en muchos sentidos desde entonces.
El agente me responde que es una cuestión de oferta y demanda. La mosca dejó sembradas las huevas que se hicieron larvas. Se creó una estructura de dependencia tal que aun habíando gobiernos con Estados independientes, seguieran necesitando la protección de sus antiguas metrópolis.
Eso se traduce en: me das esto, esto otro y aquello, mientras te protejo para que sigas gobernando.
Cuando le dije al oficial de policía que no entendía por qué Moratinos y Bono estaban metidos en ese fango de apoyo a la dictadura guineana, el hombre dice:
"Por lo que te acabo de decir. Esos dos señores, solo son dos de las personalidades de la política española que se han dejado lucir apoyando abiertamente la dictadura guineana; esos dos son unos sinvergüenzas, siempre lo han sido, al margen de sus diplomáticos discursos de cara a la galería.
Debéis saber que hay muchos más como Bono y Moratinos. No te puedes imaginar de lo se entera uno que lleva tanto tiempo trabajando como policía como yo. La cuestión Guineana nos llevaría semanas y meses tratando de dilucidarla punto por punto.
No obstante, para no volverte loco, hijo, quédate con lo que te he dicho hoy, son unos sinvergüezas que están amasando fortuna con Guinea Ecuatorial: es cuestión de dinero".
Yo al oficial de policía le pregunto: ¿España no ganaría más con una Guinea Ecuatorial libre, democrática?
"Verás, en mi opinión, la política oficial de España hacia Guinea Ecuatorial es una tapadera en cuanto permite y consiente que los lobbies españoles en conivencia con el dictador guineano roben impunemente al pueblo de Guinea Ecuatorial.
Pasaríamos días enteros tratando de explicarte todo esto. Tú quédate con que por dinero, España nunca favorecerá ningún cambio en Guinea Ecuatorial".
Ese país es demasiado tentador como para que de la noche a la mañana nadie deje de codiciar semejante manjar.
¿Y cómo podemos salir de esta?, le pregunto.
Si algún día volvemos a encontrarnos, te lo explicaré.
Me parece injusto que no pueda ayudarnos España a ser libres, cuando los españoles no derramaron su sangre en batallas hépicas para defender su posesión sobrecomo ocurriera en muchas de sus otras colonias. Es una deuda moral, si no histórica.
La próxima vez, te cuento más, me dice, y nos despedimos cuando en Valladolid ya eran las doce horas del mediodía, 21 de abril del 2016.
Edición: Bk
El Muni