Windhoek, mar 2015.
El recién nombrado ministro de Erradicación de la Pobreza y Bienestar Social de Namibia, el obispo Zephania Kameeta, afirmó que la miseria existente hoy en el país puede y será erradicada.
Eso no significa que la gente vivirá en mansiones o conducirá coches de lujo, lo que necesitamos es que las personas tengan sus necesidades básicas cubiertas, subrayó Kameeta en una entrevista publicada este miércoles en el diario Namibian Sun.
Hizo hincapié en que no hay necesidad de medir la pobreza, ya que es abrumadoramente visible. "Lo vemos todos los días, no es necesario buscar por mucho tiempo. Ves a la gente sin nada; usted no sabe cómo viven. Ves a la gente en los llamados asentamientos informales, en los vertederos de basura", señaló.
Más adelante precisó que es triste la imagen de un niño desnutrido. Y concluyó que "no se puede decir que la gente está luchando para conseguir comida en su mesa, ya que ni siquiera tienen mesas".
El titular saludó la creación de este ministerio como parte de la reestructuración realizada por el presidente Hage Geingob. "Es bueno contar con un ministerio que está concentrado en esa sola cuestión", acotó.
Mujeres herero cerca de Uis, Namibia. En Opuwo, al noroeste de Namibia, en la región de Kaokoland, se encuentran las mujeres Herero. En la capital, Windohek, podían encontrarse algunas de ellas aisladas. Los Herero son una etnia del grupo bantú que también habita en Angola y en Bostwana, aunque en menor número. Sólo en Namibia formaban una población de más de 100.000 personas. Las mujeres Herero vestían largos y voluminosos vestidos victorianos con mangas abullonadas y alegres colores. En la cabeza lucían un curioso tocado alargado y plano. Fueron los misioneros alemanes los que introdujeron esos vestidos, según la moda europea del s. XIX. Así que la indumentaria herero era un residuo de la época colonial. Era un contraste verlas hablando con sus vecinas Himbas semidesnudas, con su atuendo tradicional de pieles.- El Muni