El presidente de Zimbabue, Robert Mugabe, celebró este sábado por todo lo alto en las Cataratas Victoria su 91 cumpleaños, en un evento durante el que amenazó con nacionalizar la industria privada de safaris del país.
“Somos dueños de la tierra pero no de toda la tierra de Zimbabue. Todavía no”, dijo en un discurso de dos horas Mugabe, vestido con un traje negro y una corbata roja a juego con su bufanda.
“No somos dueños de los animales, incluso de los que corren de aquí para allá por nuestros bosques”, declaró Mugabe, en referencia a los propietarios blancos de parques naturales en el país.
“No hay supervisión, pero vamos a invadir esos bosques”, aseguró el presidente, en unas palabras que recuerdan a la reforma agraria que en 2000 llevó a las invasiones de granjas de blancos, que supuso la pérdida de sus propiedades a unos 4.000 granjeros.
Para el presidente de Zimbabue, “ellos (los europeos) tienen todavía haciendas y organizan de forma privada visitas desde América”.
“Matan a los animales y se llevan los trofeos con ellosaseveró Mugabe, que fue recibido en el acto con ocho enormes pasteles, uno de ellos con la forma de las Cataratas Victoria, una de las siete maravillas del mundo.
Además de mandar ese mensaje a los operadores de safaris, Mugabe lanzó globos al aire y cortó varios trozos de tarta.
Miles de jóvenes escucharon pacientemente el discurso mientras sorbían yogur traído expresamente de la granja que en el centro de Zimbabue tiene la primera dama, Grace Mugabe, cuarenta años más joven que su marido, que vestía un traje largo negro y blanco.
Con motivo de este cumpleaños, las carreteras que llevan hasta las Cataratas Victoria se llenaron de automóviles, autobuses y camiones para transportar a los seguidores de la oficialista Unión Nacional Africana de Zimbabue-Frente Patriótico (ZANU-PF).