Los acontecimientos tuvieron lugar en el hotel INDÉPENDANCE de Dakar. Después de haberse acostado con la prostituta el «French man» le tendió el nuevo billete de 500fcfa.
La mujer toda contenta como si hubiera ganado un jack-pot o el premio gordo manifiesta su felicidad agradeciéndole al cliente por su generosidad.
Ella creía tener entre las manos un billete de 500 euros.
En la puerta del hotel, toma asiento en un taxi. Durante el trayecto, ella le tregunta al taxista si podía ayudarle a cambiar los quinientos euros.
El taxista, un tal Moustapha Cissé, igualmente contento, condujo a la chica hasta el domicilio de un amigo, digamos, un cambiador designado de devisas.
Éste último examina el billete y la hace saber a la buena dama que ha sido engañada.
Fuente: sanslimites.org