Hija única, modelo en Costa de Marfil, acababa de firmar un contrato publicitario para ir a trabajar a Italia. El taxista que le lleva a su casa, con otros tres hombres la arrojan en la carretera con el coche en marcha para robarle. Muere finalmente en el hospital por una dejación de funciones de los médicos. |

La señora Fadiga Sirakoné todavía aturdida por la pérdida de su única hija, explicó entre sollozos varias circunstancias fundadas de la muerte de su hija en espera de los resultados definitivos de la autopsia.
La también presidenta de una ONG llamada "Mujer de Côte d'Ivoire" que lucha contra la injusticia, no tiene intención de dejar que la muerte de su hija caiga en el olvido después del funeral que estaba previsto, como más tardar, el martes 1 de abril pasado.
Según ella, su única hija, por sus actividades como modelo, volvía de dos plateaux aquél domingo 23 de marzo, entorno a las 22 horas. Y después de visitar a unos amigos cogió un taxi con taxímetro. Fue en el trayecto hacia su casa cuando fue agredida por cuatro individuos, el conductor y otros tres individuos, según le contaron a la madre los testigos que presenciaron la escena.
Awa fue arrojada del vehículo en marcha a la altura del puente de la gendarmería de Agban. En la caída, se golpeó la frente contra la acera antes de perder la conciencia.
Un comandante de la gendarmería llegó inmediatamente a la escena, alertó a los otros agentes del cuartel Mirador de Adjamé. Estos últimos, después de una inspección protocolaria, llamron a los bomberos para la evacuación de la chica al hospital de Cocody.
"Awa no fue atacada con arma blanca ni violada por sus agresores. Tampoco se llevaron todas sus pertenencias, solo sus ordenadores portátiles justifican la acción de esos bandidos", precisó la madre en una versión contraria a las alegaciones de Yavo Nelly, el supuesto agente de Awa Fadiga
Seguidamente, la señora Fadiga contó que al llegar al hospital de Cocody su hija seguía inconsciente y en ese estado fue abandonada a su suerte; la dejaron tendida en el mismo suelo de la estancia donde la colocaron, en un charco de sangre sin que ningún médico viniera a socorrerla.
Esa información llegó de una empleada del servicio en el CHU que se hizo cargo de la víctima limpiándola antes de que otra mujer le diera una prenda de vestir supo la Sra. Fadiga.
La mujer pasó toda la noche preocupada, no pudiendo contactar con su hija por teléfono.
Si el incidente tuvo lugar el domingo 23, no hasta el lunes 24 de marzo, al rededor de las nueve de la mañana cuando un gendarme descolgó el teléfono de su hija para comunicarle que se fuera lo más rápidamente posible su base de Adjamé Mirador.
Al llegar al cuartel de la gendarmería fue informada de la agresión sufrida por su hija.
Después de las formalidades al uso en las instalaciones de la gendarmería, la familia de la chica, acompañada de un gendarme se dirigió al hospital donde se topan con el primer impacto emocional; Awa, su hija, estaba tendida en el suelo sin ninguna asistencia.
«Cuando los médicos nos vieron llegar con el gendarme, dieron a una enfermera la orden de colocar a mi hija en una cama. Nos prescribienron inmediatamente una receta que representaba los primeros auxilios que recibiría mi hija. Imagináos que la niña había estado en el hospital desde el domingo a las 23 horas hasta nuestra llegada a las 13 horas del lunes sin ser atendida por nadie.
La receta nos costó 12 000 Fcfas, digo bien, 12 000 Fcfas. Por esa cantidad mi hija fue abandonada a su suerte en el hospital toda la noche. Han matado a mi hija por 12 000 Fcfas (llora desolada la mujer…), explicó con los ojos empañados de lágrimas.
Awa habría escuchado las voces de sus padres, según cuenta la madre, y empezó a moverse muy lentamente.
Después de los primeros cuidados, los médicos avisaron a la familia que era necesario que la enferma fuera derivada al servicio de scanner, precisando previamente que el scanner en plaza estaba defectuoso. Forzados por ese contratiempo que tampo lo es, pues son cosas habituales en África, entorno a las 16 horas decidimos irnos a una clínica situada en frente de la escuela André Malraux Malraux de la Riviera.
La joven fue entonces trasladada en una ambulancia de SAMU para pasar el scanner que costaría la suma de 60.000 Fcfas. Después de negociar el coste de la operación, la familia pagó 50 000 Fcfas (75 euros), contradiciendo de esa forma la versión del Ministerio de Sanidad que, a través de un comunicado, indicó que las pruebas por scanner quedaban aseguradas por el Estado.
Fue a la vuelta de la clínica cuando Awa empezó a tener problemas respiratorios. Así fue llevada de urgencia a la sala de reanimación al rededor de las 18 horas de ese lunes, después de que la tía de la chica emplazara a un médico, el profesor Teki .
«Mi hija empezaba a tener probelmas respiratorios sin que ningún médico se ocupara de ella. Hizo falta que mi hermana entrara a forzarle al profesor Teki en su despacho para que ordenara a sus subordinados enviar mi hija a la sala de reanimación. Y en la sala, el aparato que debía servir de bomba, nos dijo el médico responsable que dicho aparato era de su propiedad y que no estaba obligado a ayudarnos», informó la madre.
En la sala de reanimación, la persona encargada de poner la luz a través de una campaña publicitaria de Côte d'Ivoire Télécom falleció el martes 25 de marzo a las 11 horas, ante la impotencia de todos nosotros.
La madre indignada se fue pues a enfrentarse con el profesor Teki quien le reveló que el CHU de Cocody no podía garantizar los primeros auxilios simplemente porque ese servicio no existía.
«Cuando Awa falleció, me fui al despacho del profesor para hacerle una sola pregunta. Yo le preguntá si no había tratamiento para primeros auxilios en el hospital de Cocody como para dejar morir a mi hija de esa manera. El profesor me dijo lo siguiente: Señora, a pesar de todo lo que dice el gobierno en los medios, la realidad es totalmente otra sobre el terreno.
El CHU de Cocody no tiene medicamentos para primeros auxilios, me respondió el profesor», contó la madre entre llantos.
Para la señora Fadiga el CHU de Cocody es responsable de la muerte de su hija que venía de firmar un contrato publicitario para un viaje en Italia
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«El CHU de Cocody es responsable de la muerte de Awa. Ellos prestaron juramento para sanar, no tienen ningún derecho dejar morir a la gente por 12.000 Fcfas . No voy a dejar este asunto de la muerte de mi única hija, nadie muere en un hospital de primeros auxilios. No quiero más muertes solo por primeros auxilios en este país.
Donatien Kautcha