El sospechoso, Olusegun Kehinde, fue arrestado después de haber violado a la mujer que portaba su bebé de dos años,
Tras la violación, dicho violador cogió al pequeño Mamodu y lo decapitó con el fin de utilizar su cabeza en un crimen ritual. Fue un crimen de encargo.
Después de su fechoría el asesino y violador arrojó la cabeza del niño en el bosque con la intención de recuperarla más tarde. Fue durante el interrogatorio policial cuando él indico el lugar exacto donde tiró la pequeñita cabeza, según el comisario de la Policía del Estado de Ogun, Ikemefuna Okoye.
Sin embargo, después de haber confesado su crimen, Olusegun Kehinde no quiso revelar los nombres de sus socios cabecillas, los que le dieron el encargo.
Por otro lado dos personas fueron arrestadas el miércoles pasado con un cráneo humano y otras partes del cuerpo en la localidad de Idiroko, en el mismo Estado de Ogun.
Los sospechosos que se salvaron de un linchamiento seguro por parte de la muchedumbre condujeron a la policía a su guarrida donde descubrieron féretros de cráneos humanos en descomposición, fotos de personas así como cabellos.
Los crímenes rituales se encuadran en la creencia de que aportan riqueza y prosperidad. Están muy extendidos en Nigeria.
Fuente: Koaci