¡La Justicia a menudo estropea el corazón!
Valentin Olessongo, ex embajador del Congo en Marruecos pensó que tenía mucha razón justo cuando iniciaba una demanda contra el sitio web congoleño Zenga-Mambu.
En efecto, este sitio web había expuesto los vicios íntimos del hombre ante el mundo entero, al revelar que se estaba masturbando delante de una menor de edad a través de Skype.
Así, el ex embajador vio en esta acción una prueba destinada a perjudicar su futuro y su carrera política. Para su desgracia, la Corte Penal donde presentó su demanda no vio la situación con los mismos ojos que él.
Desde luego vio a un embajador nacido en 1954 que se masturbaba delante de una menor a través de Skype y que haría bien ocultarse cuanto antes, en lugar de hacer el ridículo exponiéndose.
¡Bueno, también hay que decir que hay periodistas pesados!
Fuente: netafrique.net
Traducción/Edición: Bk
El Muni